jueves, 7 de febrero de 2008

Los consejos de mamá 1, 2,3...15, 16, etc...

Es de todos saber esa frase muy sabia que dice "Cada cabeza es un mundo" ¿no?, bueno, si no la conocian pues, se las presento, estuve revisando mi correo uno de estos días y me encontre una veintena de mensajes enumerados con el nombre, los consejos de mamá, ¿quién es mamá?, una amiga de la infancia que al igual que a mi le da por escribir, diferencia entre nosotros, yo no aconsejo a gente, que viene esto al caso, es simple, si cada cabeza es un mundo, como una persona puede darme un consejo por medio de un mensaje general medio filosófico enviado a otros cuarenta tipos, me resulta muy incomprensible.

Hasta el día de hoy me he privado de usar mis letras para aconsejar a una persona, en ciertos casos si lo he hecho de palabra, al final, un consejo es simple y sencillamente la transmisión de una experiencia vivida y lo que aprendimos de ella, pero me parece demasiado atrevido el decirle a alguien que errores cometer y que no. Cada ser humano (si este no ha nacido con algún sindrome o lesión) es capaz de razonar, es capaz de vivir su vida de forma independiente y aprendiendo de ella, además las percepciones de las cosas de cada quien puede ser parecida, pero nunca va a ser la misma, no puedo hablarle de un consejo formato a cuarenta pesonas esperando que lo perciban de igual modo, me parece que eso seria subestimar las capacidades de ellas (personas) , y de paso, ofender el intelecto sin importar lo ejercitado que este esté.

Así que mamá, no sos tan distinta a nosotros, no sos el faro que alumbra en la obscuridad, la superioridad dejasela a los superiores, si es que estos existen, mientras tanto yo te doy un consejo, primero mira a tus aconsejados como seres humanos, luego si queres cambiar su vida, pues intentalo, aunque no te lo recomiendo.

Te dejo tres opciones; una, cambia el nombre; dos, personaliza cada mensaje hacia cada persona; tres, podes segir fingiendo que sos importante en la vida de cada una de tus hormiguitas y no prestar la más mínima atención a lo que he puesto.

Hasta luego mamá.